El David Kempinski Tel Aviv

Si le cuesta decidirse entre la playa y la ciudad, está de suerte: Situado en la calle HaYarkon, este hotel de 34 plantas está a pocos pasos de la playa y del paseo marítimo de Tel Aviv. Más allá, tiene toda la ciudad -y muchos puntos de interés cultural- fácilmente accesibles, con, por ejemplo, el casco antiguo de Jaffa, el bulevar Rothschild y el Museo de Tel Aviv, todos ellos a menos de 15 minutos. El aeropuerto está a unos 35 minutos en coche, y el hotel puede organizar un servicio de recogida VIP. También hay aparcamiento en el hotel si se opta por alquilar un coche. Además de explorar la ciudad, la ubicación permite aventurarse a otras zonas, ya que Jerusalén está a sólo una hora.  

Con un ambiente sofisticado y estilizado, el hotel ofrece la cantidad justa de opulencia, que combina bien con los colores básicos y la luz natural -además de las vistas azules del Mediterráneo- que entran por los numerosos ventanales del establecimiento. Las 250 habitaciones y suites impresionan (muchas tienen vistas al mar) y recomendamos optar por una que ofrezca acceso al Horizon Lounge, un refugio en la planta 22 que incluye comida y bebidas gratuitas, su propia piscina y terraza, y registro de entrada y salida privado con la playa como telón de fondo. (Si viaja con niños, tenga en cuenta que el salón es para mayores de 13 años). En cuanto al alojamiento, la joya de la corona es, sin duda, la suite David Penthouse, de tres plantas y más de 1.000 metros cuadrados, que incluye un gimnasio, una piscina infinita privada y habitaciones y salas de estar independientes.

El hecho de que el hotel ofrezca acceso directo a la playa es un gran atractivo, pero también hay mucho más que le gusta. Lo primero: La comida. Hay cinco opciones kosher en el hotel, incluido el restaurante Sereia, centrado en el pescado y situado frente a la playa, donde podrá disfrutar de las tres comidas, así como de una cena de Shabat los viernes. Para una comida más ligera, visite el Sereia Lounge, mientras que The Common alberga el primer bar de puros Cohiba Atmosphere del país y el bar de whisky House of Macallan.

Las actividades -esquí acuático, vela, ciclismo- abundan en la playa y en el hotel, pero si prefiere pasar el rato junto a la piscina, puede hacerlo en la piscina infinita de la 5ª planta. (Una idea: Acompáñela con una bebida o un aperitivo, como quesadillas de cordero o ceviche peruano, de The Pool Bar). Para el 2023 está la azotea Cloud51, una piscina privada y zona de descanso para los huéspedes que reserven las Signature Suites, que se convierte en un lugar de ocio nocturno abierto al público por las noches. Y, por supuesto, todo lo que la ciudad tiene que ofrecer. Algunos consejos: Pruebe el tradicional y colorido hummus en Abu Hassan, visite el museo Ilana Goor en Jaffa para ver una increíble y ecléctica colección de arte, y escuche jazz en directo en el prestigioso Beit Haamudim, donde las actuaciones tienen un límite de 10 personas.

Si reserva a través de F1S, recibirá un desayuno diario para dos personas, un crédito de 100 dólares para comida y bebida, y servicios de bienvenida gratuitos, así como una mejora y una entrada y salida anticipada, si está disponible.